I'll never be your priority
viernes, 2 de diciembre de 2011
martes, 8 de noviembre de 2011
Fragmento de "Convertirse en pájaro"
"-Al principio se hace raro-dijo Emily-. Recuerdo perfectamente el día que me fui de Wilmington, de una mansión a pie de playa y una cama de plumas, a la parte de atrás de una furgoneta destartalada, rumbo a Kentucky, para una actuación. Pasamos dos o tres noches durmiendo todos juntos en la furgoneta, apretujados y teniendo que salir afuera a hacer pis en la tierra y en medio de la nada. Llegamos a Kentucky por la mañana, el dinero no nos daba para gasolina ni para una habitación de motel, así que los chicos gastaron el poco dinero que había en comida y desayunamos en la furgoneta. Hasta que de repente Ethan dijo: "Mammot".
-¿Mammot?-preguntó Avery.
-Yo dije lo mismo-dijo Emily, sonriendo-. Ethan se refería a la cueva Mammot. Una hora después estábamos entrando en una gruta con lámparas de gas, comida y mantas, avanzando por un camino muy estrecho, con las paredes de la cueva a los lados, con mucha oscuridad. Recuerdo que Ryan iba delante, luego Blake, yo, y Ethan detrás, que me había dejado a mí delante porque sabía que me daría miedo ir la última, y me aferraba la cintura y me susurraba que estuviera tranquila, que no había nada que pudiera hacerme daño. Creo que nos perdimos un par de veces porque el camino se bifurcó más de una vez hasta que Ethan dijo que fuésemos por la derecha y de repente la cueva se hizo enorme, una enorme bóveda con una superficie lisa de piedra. Iluminamos la estancia con las lámparas de gas y algunos murciélagos salieron volando por donde habíamos venido. Me asusté mucho y más miedo me dio darme cuenta que íbamos a quedarnos allí todo el día. Pero el miedo desapareció, ¿sabes?, con la cueva iluminada, sentados en mantas, comiendo y charlando, cuando me quise dar cuenta ya no tenía miedo, al contrario, estaba muy cómoda, incluso dormimos un rato y fue el mejor sueño de mi vida, hacia calorcito, no se escuchaba nada y yo entre los brazos de Ethan me quedé profundamente dormida enseguida. Esa noche tocaron, les pagaron y volvimos a la carretera. No recuerdo cual fue el siguiente destino, a partir de ahí me convertí en nómada, como ellos, el resto es una sucesión de recuerdos y lugares hermosos."
-¿Mammot?-preguntó Avery.
-Yo dije lo mismo-dijo Emily, sonriendo-. Ethan se refería a la cueva Mammot. Una hora después estábamos entrando en una gruta con lámparas de gas, comida y mantas, avanzando por un camino muy estrecho, con las paredes de la cueva a los lados, con mucha oscuridad. Recuerdo que Ryan iba delante, luego Blake, yo, y Ethan detrás, que me había dejado a mí delante porque sabía que me daría miedo ir la última, y me aferraba la cintura y me susurraba que estuviera tranquila, que no había nada que pudiera hacerme daño. Creo que nos perdimos un par de veces porque el camino se bifurcó más de una vez hasta que Ethan dijo que fuésemos por la derecha y de repente la cueva se hizo enorme, una enorme bóveda con una superficie lisa de piedra. Iluminamos la estancia con las lámparas de gas y algunos murciélagos salieron volando por donde habíamos venido. Me asusté mucho y más miedo me dio darme cuenta que íbamos a quedarnos allí todo el día. Pero el miedo desapareció, ¿sabes?, con la cueva iluminada, sentados en mantas, comiendo y charlando, cuando me quise dar cuenta ya no tenía miedo, al contrario, estaba muy cómoda, incluso dormimos un rato y fue el mejor sueño de mi vida, hacia calorcito, no se escuchaba nada y yo entre los brazos de Ethan me quedé profundamente dormida enseguida. Esa noche tocaron, les pagaron y volvimos a la carretera. No recuerdo cual fue el siguiente destino, a partir de ahí me convertí en nómada, como ellos, el resto es una sucesión de recuerdos y lugares hermosos."
lunes, 19 de septiembre de 2011
Go forth
Tu vida es tu vida
No dejes que sea golpeada contra la húmeda sumisión
Mantente alerta
Hay salidas
Hay una luz en algún lugar
Puede que no sea mucha luz pero vence a la oscuridad
Mantente alerta
Los dioses te ofrecerán oportunidades
Conócelas, tómalas
No puedes vencer a la muerte pero puedes vencer a la muerte en vida, varias veces
Y cuanto más a menudo aprendas a hacerlo, más luz habrá
Tu vida es tu vida
Conócela mientras la tengas
Tú eres maravilloso
Los dioses esperan para deleitarse en tidomingo, 18 de septiembre de 2011
Mi tormenta favorita
Acércate, no hay forma de frenar,
para ya mis sueños inevitables,
me puedes curar este silencio insoportable,
tuve miedo de mi, quise escapar de ti,
quise apagar con gasolina el fuego,
vas desafiando con tus alas a la gravedad, con tu fuerza infinita,
me pierdo en tus ojos y me vuelvo a encontrar,
que mi alma me lo grita, eres mi tormenta favorita.
A dónde quieras ir te seguiré, serás mi luna en los caminos oscuros, yo creo en ti, y me soltaré de mi pasado y mi futuro.
Hazme despegar...
lunes, 12 de septiembre de 2011
Trabajos de Simon Casas
Estos son algunos de los trabajos de Simon Casas, el chico que se va a encargar de las ilustraciones de mi nuevo libro.
viernes, 9 de septiembre de 2011
Sé perfectamente lo que debo hacer, pero...no lo hago, no encuentro las fuerzas para hacerlo.
Esos ojos, tus ojos...en cuanto encuentro las fuerzas para alejarme, los miro, me miras y se me va la fuerza por la boca.
¡Tortúrame, pégame, ignórame, olvídame, maltrátame!. ¡Haz lo que quieras de mí, pero, por favor, no me mires!. No me mires con esos ojos en los que me pierdo, en los que me olvido de mi nombre, y hasta de quién soy, esos ojos profundos que me atrapan y me desarman sin compasión, sin darme la oportunidad de escapar.
¿Qué estás haciendo conmigo?.
¿Cómo puedes tenerme de ese modo y yo no tenerte a ti?.
Ignórame, por favor, ignórame, y sobre todo, sobre todas las cosas, no me mires.
miércoles, 7 de septiembre de 2011
La historia del ser cálido y el ser gélido
Esta es la historia de dos seres totalmente opuestos, uno era el ser del fuego, del calor, la energía para que el sol brille; el otro era el ser del frío, del hielo, de lo gélido.
Un día sus caminos se cruzaron, el ser cálido, curioso y travieso se adentró en el palacio de cristal, hielo y granito del ser gélido, encontrándolo en el corazón de sus profundidades y enamorándose perdidamente de él nada más verlo.
El ser cálido le declaró su amor al ser gélido, rogándole que su amor fuese correspondido.
-Te entregaré mi amor, ser cálido, solo si pasas una serie de pruebas.
El ser cálido preguntó cuales eran esas pruebas, jurando que fuese lo que fuese lo afrontaría, decidido a conseguir el amor del ser gélido.
-Tráeme un diamante púrpura de las profundidades de la selva de África.
El ser cálido sabía que aquella tarea no sería fácil, ya que cualquier cosa que entraba en contacto con su piel se fundía; aún así fue cruzando el cielo, dejando una estela de humo y fuego en el aire, rumbo a África, internándose en la selva y buscando el yacimiento del preciado diamante púrpura.
Lo intentó una y otra vez, fundiendo todos los diamantes que tocaba con sus manos, hasta que recordó una cosa, cerca de allí crecía un tipo de árbol de dura y fuerte corteza como roca, cogió un trozo y con cuidado colocó el diamante sobre la corteza, consiguiendo así el diamante y volando de vuelta al castillo para entregárselo a su amor.
-Ahora tienes que renunciar a todo lo que eres, a tus principios, a tus creencias, a tus manías, a tus costumbres, abandona todo lo que eres y sé lo que yo quiero.
-Abandono todo lo que soy, porque ahora todo lo que soy eres tú-dijo el ser cálido.
-Una última cosa y mi amor será tuyo para siempre, abandona al arcoiris para siempre, no vuelvas a acercarte a él, ni a visitarlo.
-¡No puedo hacer eso, el arcoiris es mi amigo desde hace miles y miles de años!.
-Ya no lo necesitas, a partir de ahora yo seré tu mundo, todo girará en torno a mí.
El ser cálido aceptó, con todo el dolor de su corazón, ya que el arcoiris había sido su amigo desde que le alcanzaba la memoria, con el que le gustaba charlar meses enteros cada vez que subía al cielo a recargar de luz y calor al sol.
Pasadas las tres pruebas, el ser gélido le entregó su amor, y a partir de ahí fueron inseparables. Los momentos de amor no pararon de sucederse, el cariño y la ternura.
Hasta que un día todo empezó a cambiar, el frío del ser gélido empezó a congelar al ser cálido, congelándolo con su indiferencia, su desprecio y sus mentiras.
Poco a poco el ser cálido se fue apagando, volviéndose un ser triste de aspecto negruzco y chamuscado, carente de la luz y la vida que había tenido antes. Siempre tenía frío y a causa de la prohibición de volver a ver al arcoiris no podía subir a recargar al sol, apagándose este y convirtiendo el mundo en una noche eterna y gélida.
El amor y el cariño se trocó en desprecio, dolor y mentiras, hasta que finalmente el ser gélido se cansó del ser cálido, desterrándolo de su castillo para siempre.
El ser cálido, destrozado y apagado volvió a su hogar, permaneciendo enclaustrado durante siglos en su cueva bajo tierra.
Entonces el arcoiris, rompiendo todas las normas de la tierra, bajó del cielo y fue hasta el ser cálido, animándolo a seguir adelante y a volver a ser la luz de la tierra.
El ser cálido volvió a subir al cielo y encendió el sol, encendiéndose el mismo de nuevo, pero entonces el ser gélido, aburrido en su castillo de granito y hielo reclamó la atención del ser cálido, abriendo de nuevo las heridas del ser cálido y echando sal en ellas, para que le escociesen y no olvidase que sufría por él, volviendo para torturarlo y al comprobar que el ser cálido seguía sufriendo por él, volvía a marcharse.
Y así, cada vez que el ser cálido iba cerrando sus heridas, el ser gélido volvía para volver a abrirlas, sometiendo al pobre ser de fuego una tortura constante.
Pero un día, de repente, el ser cálido se dio cuenta que las heridas cada vez se iban cerrando con más rapidez y que cuando el ser gélido volvía para herirlo, las heridas eran cada vez menos profundas, hasta que llegó el día que ni siquiera pudo hacerle un arañazo.
-Ya no ejerces ninguna influencia sobre mí, vete por donde has venido, vuelve a tu miserable, vacía y aburrida vida en tu castillo de granito y hielo. No quiero un ser gris y frío en mi vida, un ser sin sentimientos ni consideración y con un corazón de hielo. No seré nunca más tu segunda opción, no seré tu comodín.
El ser gélido no daba crédito a las palabras del ser cálido, de ese ser que hace nada daba la vida por él y que tan seguro pensaba que tenía.
El ser cálido lo desterró de su reino de fuego con una gran llamarada que lo dejó semi derretido, marchándose el ser gélido goteando hielo de su propio cuerpo.
El ser cálido, ahora más fuerte, brilló más que nunca, haciendo al sol brillar como nunca antes, sin saber que miles de seres cálidos como él poblaban la tierra, dispuestos a entregarle su amor sincero y puro, a él, al rey de los seres cálidos.
sábado, 3 de septiembre de 2011
miércoles, 31 de agosto de 2011
...
Bueno, no es fácil hablar de ti, no es fácil recordarte, no es fácil vivir sin verte, sin hablar contigo, nada es fácil desde que te fuiste.
Cuando te fuiste, muchas partes de ti se quedaron aqui, muchas cosas, y una de esas cosas fue tu ausencia; una ausencia cruel e insensible que me ataca cuando menos lo espero, que me zarandea, me tira al suelo y me arrastra, me golpea sin piedad sin escuchar mis súplicas, no claudica ante mis ruegos.
Pero otra de las cosas que dejaste, que me dejaste, fue tu fortaleza, una fortaleza capaz de combatir a esa incansable y perspicaz ausencia que me acosa, una fortaleza capaz de levantarme del suelo y desenvainar su espada contra la temible ausencia-
Eres una herida que no cicatriza, te llevo y te siento en cada recoveco de mi ser.
No, no me resulta fácil hablar de ti, y me encantaría poder hacerlo, me encantaría decirle a alguien todo lo que llevo dentro y llorar por ti, liberarme, pero no puedo, no soy capaz.
Tengo un miedo atroz de olvidar tu voz, constantemente la imagino en mi cabeza con el afán de no olvidarla, me moriría de tristeza si algún día recurro a mi memoria para escucharte y no te escucho, tu voz en mi memoria es lo único que me queda de ti.
Te veo, en tus hermanos, a los que siento como los míos, en cualquier muchacho moreno con gafas, a lo lejos, en situaciones, tu recuerdo me asalta cuando menos lo espero y me deja sin respiración.
Te quiero, te quiero, te quiero!, y te echo de menos todos los días desde que te fuiste.
Espérame, en algún lugar sobre el arcoiris.
Cuando te fuiste, muchas partes de ti se quedaron aqui, muchas cosas, y una de esas cosas fue tu ausencia; una ausencia cruel e insensible que me ataca cuando menos lo espero, que me zarandea, me tira al suelo y me arrastra, me golpea sin piedad sin escuchar mis súplicas, no claudica ante mis ruegos.
Pero otra de las cosas que dejaste, que me dejaste, fue tu fortaleza, una fortaleza capaz de combatir a esa incansable y perspicaz ausencia que me acosa, una fortaleza capaz de levantarme del suelo y desenvainar su espada contra la temible ausencia-
Eres una herida que no cicatriza, te llevo y te siento en cada recoveco de mi ser.
No, no me resulta fácil hablar de ti, y me encantaría poder hacerlo, me encantaría decirle a alguien todo lo que llevo dentro y llorar por ti, liberarme, pero no puedo, no soy capaz.
Tengo un miedo atroz de olvidar tu voz, constantemente la imagino en mi cabeza con el afán de no olvidarla, me moriría de tristeza si algún día recurro a mi memoria para escucharte y no te escucho, tu voz en mi memoria es lo único que me queda de ti.
Te veo, en tus hermanos, a los que siento como los míos, en cualquier muchacho moreno con gafas, a lo lejos, en situaciones, tu recuerdo me asalta cuando menos lo espero y me deja sin respiración.
Te quiero, te quiero, te quiero!, y te echo de menos todos los días desde que te fuiste.
Espérame, en algún lugar sobre el arcoiris.
Nadie a la vista, no hay coartada, estamos desapareciendo más rápido que la velocidad de la luz, aprovechar las oportunidades, chocar y quemarnos, no, nunca vamos a aprender.
Me desmoroné, pero me levanté una vez más, ambos pudimos ver tan claro como el cristal que el fin inevitable estaba cerca, tomamos nuestra decisión a prueba de fuego.
LUCHAR ES LA ÚNICA FORMA DE SENTIR.
domingo, 28 de agosto de 2011
YOU
You don’t want me, no
You don’t need me
Like I want you, oh
Like I need you
And I want you in my life
And I need you in my life
You can’t see me, no
Like I see you
I can’t have you, no
Like you have me
And I want you in my life
And I need you in my life
Oh, Oh, Ohhh
Oh, Oh, Ohhh
You can’t feel me, no
Like I feel you
I can’t steal you, no
Like you stole me
And I want you in my life
And I need you in my life
You don’t need me
Like I want you, oh
Like I need you
And I want you in my life
And I need you in my life
You can’t see me, no
Like I see you
I can’t have you, no
Like you have me
And I want you in my life
And I need you in my life
Oh, Oh, Ohhh
Oh, Oh, Ohhh
You can’t feel me, no
Like I feel you
I can’t steal you, no
Like you stole me
And I want you in my life
And I need you in my life
lunes, 8 de agosto de 2011
Lista de canciones
Hoy no paro de pensar en el nuevo libro, incluso le he puesto título, "Cicatrices".
Antes de empezar a escribir cualquier libro o relato, selecciono una lista de canciones que me inspiran para escribir dicha historia o me recuerdan a ella, o me parecen adecuadas, como una especie de banda sonora particular para cada historia; yo y mi mente cinéfila, que no puede evitar ver el lado cinematografico incluso cuando escribo, poniendo música en varias escenas he incluso imaginando planos he iluminación.
No creo que esto interese a demasiada gente, pero de todos modos voy a poner la lista de canciones que he escogido para la "banda sonora" de "Cicatrices".
Antes de empezar a escribir cualquier libro o relato, selecciono una lista de canciones que me inspiran para escribir dicha historia o me recuerdan a ella, o me parecen adecuadas, como una especie de banda sonora particular para cada historia; yo y mi mente cinéfila, que no puede evitar ver el lado cinematografico incluso cuando escribo, poniendo música en varias escenas he incluso imaginando planos he iluminación.
No creo que esto interese a demasiada gente, pero de todos modos voy a poner la lista de canciones que he escogido para la "banda sonora" de "Cicatrices".
- "After afterall" - William Fritzsimmons
- "Sweet dreams" - Emily Browning
- "My medicine" - The Pretty Reckless
- "Ignorance" - Paramore
- "Pressure" - Paramore
- "I don't feel it anymore" - William Fritzsimmons
- "The kill" - 30 seconds to Mars
- "Playing god" - Paramore
- "We feel alone" - William Fritzsimmons
- "Make me wanna die" - The Pretty Reckless
- "Nothing" - The Script
- "Almost honest" - Josh Kelley
- "Let this go" - Paramore
- "The only exception" - Paramore
- "Further from you" - William Fritzsimmons
- "Let the flames begin" - Paramore
- "Miss Nothing" - The Pretty Reckless
- "From yesterday" - 30 seconds to Mars
- "Chop and change" - The black keys
- "Breaking out, breaking down" - Bullet for my valentine
- "Just not each other" - William Fritzsimmons
- "House of wolfes" - My Chemical Romance
- "Conspiracy" - Paramore
- "Even now" - William Fritzsimmons
- "Calling out your name" - James Blunt
- "Crushcrushcrush" - Paramore
- "Franklin" - Paramore
- "We are broken" - Paramore
- "Walk away" - The Script
- "Misguided ghosts" - Paramore
- "My heart" - Paramore
- "They'll never take the good years" - William Fritzsimmons
- "Maybe be alright" - William Fritzsimmons
- "Hurricane" - 30 seconds to Mars
- "Chasing cars" - Snow Patrol
- "Come back down" - Lifehouse
- "Adore" - Hayley Williams
- "Surrender" - Billy Talent
- "The best i ever had" - The Swellers
- "Glitter in the air" - Pink
- "Wreck of the day" - Anna Nalick
- "Street map" - Athlete
- "Everytime we touch" (Slow) - Cascada
- "Jar of hearts" - Christina Perri
- "Decode" (Acústico) - Paramore
- "12.23.95" - Jimmy Eat World
- "Drugs for me" - Jimmy Eat World
- "My sundown" - Jimmy Eat World
- "23" - Jimmy Eat World
- "Everything" - Lifehouse
- "Faith love hope" - Starsailor
- "Only hope" - Switchfoot
- "Breakeven" - The Script
- "Hope" - The Submarines
- "This is war" - 30 seconds to Mars"
- "Alibi" - 30 seconds to Mars"
- "100 suns" - 30 seconds to Mars
- "Monster" - Paramore
lunes, 1 de agosto de 2011
"Sky apoyó su mano sobre el torso desnudo de Nate.
-Tu corazón late-dijo Sky-Tu piel desprende calor, la sangre fluye por tus venas. Estas vivo.
Sky retiró su mano y tomó la de él, poniéndola bajo su pecho izquierdo, justo donde estaba su corazón y donde Nate debería haber notado sus latidos.
-¿Ves?-dijo ella-Nada.
Nate cambió su mano grande y cálida de posición, colocándola más arriba, cerca del cuello.
-No siento tu corazón, pero siento tu alma-dijo él."
-Tu corazón late-dijo Sky-Tu piel desprende calor, la sangre fluye por tus venas. Estas vivo.
Sky retiró su mano y tomó la de él, poniéndola bajo su pecho izquierdo, justo donde estaba su corazón y donde Nate debería haber notado sus latidos.
-¿Ves?-dijo ella-Nada.
Nate cambió su mano grande y cálida de posición, colocándola más arriba, cerca del cuello.
-No siento tu corazón, pero siento tu alma-dijo él."
domingo, 10 de julio de 2011
martes, 5 de julio de 2011
Hacia rutas salvajes
Es el título de un gran libro que me marcó, una gran historia real que dio como resultado una gran película con el mismo título, dirigida por Sean Penn y protagonizada por el gran Emile Hirsch.
Cuenta la historia de Chris McCandless, un jóven muchacho de Washington, de familia acomodada y con una gran inteligencia, pero con una gran carga moral por lo material, con espíritu nómada e indomable, que después de graduarse en una gran universidad donó todo el dinero de su beca a una fundación para niños sin hogar, cogió su destartalado coche que no había querido cambiar y sin decir nada a sus padres ni su hermana se lanzó a la carretera, recorriendo durante años las profundidades de Estados Unidos, sin un solo dólar, viendo mundo y conociendo gente.
Durante esos años su mayor sueño era internarse en los bosques de Alaska, con solo lo necesario y vivir de la tierra, en armonía con la naturaleza.
Allí encontró un viejo autobus abandonado al que bautizó como "El autobus mágico", en todos sus escritos interminables de sus diarios.
Después de pasar semanas en medio de los bosques de Alaska y acabársele casi las existencias decide volver a la civilización pero al intentar cruzar el río por el que había venido se lo encontró rebosado, y en lugar de buscar otro camino volvió al autobus, donde poco a poco se fue quedando sin comida, no conseguía cazar y empezó a comer plantas y frutos que iba recolectando, hasta que murió de inanición el 18 de Agosto de 1992 con sólo 24 años. Muy poca gente sabía dónde estaba y el no recibir respuesta de Chris tampoco les hubiera extrañado, pues el chico era nómada y aventurero y podían pasar meses antes de recibir una carta o postal suya.
Encontraron su cuerpo dos semanas después, metido en un saco de dormir, con claros signos de inanición y rodeado de libros y enseres personales, también encontraron un trozo de madera con la siguiente frase tallada a cuchillo por él:
"Hace dos años que camina por el mundo, sin teléfono, sin piscina, sin cigarrillos. La máxima libertad. Un extremista. Un viajero esteta cuyo hogar es la carretera. Escapó de Atlanta. Jamás regresará. La causa: <<No hay nada como el oeste>>. Y ahora, después de dos años de vagar por el mundo, emprende su última y mayor aventura. La batalla decisiva para destruir su falso yo interior y culminar victoriosamente su revolución espiritual. Diez días y diez noches subiendo a trenes de carga y haciendo autostop lo han llevado al magnífico e indómito norte. Huye del veneno de la civilización y camina sólo a través del monte para perderse en una tierra salvaje.
Alexander Supertramp
Mayo de 1992"
McCandless adoptó el apodo de Alexander Supertramp, quizá para huir de su propia vida, y todos las personas que lo fueron conociendo a lo largo de su viaje lo conocían como "Alex".
Es la historia de una persona real, de un muchacho inconformista, nómada, con ansias de vivir y ver mundo, con espíritu libre que aborrecía los vienes materiales y la hipocresía.
A mí me marcó su historia, me sentí identificada con él, me emocionó, sentí que lo conocía, que tenía un vínculo con él y sentí unas ganas enormes de vivir y experimentar, de recorrer el mundo, de lanzarme a la carretera, de dejar todo lo inútil atrás, de vivir una vida nómada, aunque claro, no en un extremo como el de Chris, que ni siquiera quería dinero, pasó hambre y frío y tuvo ese trágico final por perderse en medio de los bosques de Alaska con lo justo.
En 2007 Sean Penn llevó el libro al cine, creando una película perfecta, con el actor perfecto para encarnar a Chris, con una banda sonora magnífica y mostrando el hermoso entorno, las emociones de Chris, su espíritu, Penn consiguió que sintiésemos que habíamos hecho el camino con Chris, a través de una película.
Es una película hermosa, emotiva y reconfortante, a pesar del trágico final, la recomiendo a todo el mundo, hace que veas la vida con otra perspectiva; sin duda, una de mis películas favoritas.
Porque todos llevamos un Chris dentro...
Cuenta la historia de Chris McCandless, un jóven muchacho de Washington, de familia acomodada y con una gran inteligencia, pero con una gran carga moral por lo material, con espíritu nómada e indomable, que después de graduarse en una gran universidad donó todo el dinero de su beca a una fundación para niños sin hogar, cogió su destartalado coche que no había querido cambiar y sin decir nada a sus padres ni su hermana se lanzó a la carretera, recorriendo durante años las profundidades de Estados Unidos, sin un solo dólar, viendo mundo y conociendo gente.
Durante esos años su mayor sueño era internarse en los bosques de Alaska, con solo lo necesario y vivir de la tierra, en armonía con la naturaleza.
Allí encontró un viejo autobus abandonado al que bautizó como "El autobus mágico", en todos sus escritos interminables de sus diarios.
Después de pasar semanas en medio de los bosques de Alaska y acabársele casi las existencias decide volver a la civilización pero al intentar cruzar el río por el que había venido se lo encontró rebosado, y en lugar de buscar otro camino volvió al autobus, donde poco a poco se fue quedando sin comida, no conseguía cazar y empezó a comer plantas y frutos que iba recolectando, hasta que murió de inanición el 18 de Agosto de 1992 con sólo 24 años. Muy poca gente sabía dónde estaba y el no recibir respuesta de Chris tampoco les hubiera extrañado, pues el chico era nómada y aventurero y podían pasar meses antes de recibir una carta o postal suya.
Encontraron su cuerpo dos semanas después, metido en un saco de dormir, con claros signos de inanición y rodeado de libros y enseres personales, también encontraron un trozo de madera con la siguiente frase tallada a cuchillo por él:
"Hace dos años que camina por el mundo, sin teléfono, sin piscina, sin cigarrillos. La máxima libertad. Un extremista. Un viajero esteta cuyo hogar es la carretera. Escapó de Atlanta. Jamás regresará. La causa: <<No hay nada como el oeste>>. Y ahora, después de dos años de vagar por el mundo, emprende su última y mayor aventura. La batalla decisiva para destruir su falso yo interior y culminar victoriosamente su revolución espiritual. Diez días y diez noches subiendo a trenes de carga y haciendo autostop lo han llevado al magnífico e indómito norte. Huye del veneno de la civilización y camina sólo a través del monte para perderse en una tierra salvaje.
Alexander Supertramp
Mayo de 1992"
McCandless adoptó el apodo de Alexander Supertramp, quizá para huir de su propia vida, y todos las personas que lo fueron conociendo a lo largo de su viaje lo conocían como "Alex".
Es la historia de una persona real, de un muchacho inconformista, nómada, con ansias de vivir y ver mundo, con espíritu libre que aborrecía los vienes materiales y la hipocresía.
A mí me marcó su historia, me sentí identificada con él, me emocionó, sentí que lo conocía, que tenía un vínculo con él y sentí unas ganas enormes de vivir y experimentar, de recorrer el mundo, de lanzarme a la carretera, de dejar todo lo inútil atrás, de vivir una vida nómada, aunque claro, no en un extremo como el de Chris, que ni siquiera quería dinero, pasó hambre y frío y tuvo ese trágico final por perderse en medio de los bosques de Alaska con lo justo.
En 2007 Sean Penn llevó el libro al cine, creando una película perfecta, con el actor perfecto para encarnar a Chris, con una banda sonora magnífica y mostrando el hermoso entorno, las emociones de Chris, su espíritu, Penn consiguió que sintiésemos que habíamos hecho el camino con Chris, a través de una película.
Es una película hermosa, emotiva y reconfortante, a pesar del trágico final, la recomiendo a todo el mundo, hace que veas la vida con otra perspectiva; sin duda, una de mis películas favoritas.
Porque todos llevamos un Chris dentro...
jueves, 30 de junio de 2011
sábado, 25 de junio de 2011
domingo, 19 de junio de 2011
sábado, 11 de junio de 2011
☆ 23 ☆
No one else will know these lonely dreams
No one else will know that part of me
I won't always love these selfish things
I won't always live...not stopping
It was my turn to decide
I knew this was our time
No one else will have like you do
No one else will have me, only you
You'll sit alone forever
What are you hoping for?
I'm here, i'm now, i'm READY
Amazing still it seems
I'll be 23
I won't always love what i'll never have
I won't always live in my regrest.
miércoles, 8 de junio de 2011
sábado, 4 de junio de 2011
Fragmento de "Rojo", en fase de creación.
Summer se tapó los ojos, con una sonrisa enorme en el rostro.
-¿De qué color son mis ojos?-preguntó.
-Verdes, con un aro amarillo que rodea tus pupilas.
Summer apartó la mano de sus ojos y lo miró penetrantemente, entonces él hizo lo mismo.
-¿De qué color son mis ojos?-preguntó él, sonriendo.
-Azules.
Chris la miró, sonriendo.
-Está anocheciendo-susurró sin poder dejar de mirarla.
-¿Tienes que irte?.
-No.
-¿Y Bonnie?.
-Bonnie me importa un comino en este momento. No estás maquillada, se te ven las pecas.
-Sí, no me apetecía maquillarme.
-Eres mucho más bonita así, me gustan tus pecas.
-Y a mí tus ojos.
-Summer-susurró él.
-¿Qué?.
-Me muero por besarte ahora mismo.
Chris se acercó despacio y la besó con suavidad en los labios.
-Hueles a canela, como a brownie o a bizcocho.
-Mi abuela siempre está preparando postres, la casa siempre huele a canela, pero no sabía que yo también.
Chris sujetó un mechón de su pelo y lo olió.
-Me encanta como hueles, sobre todo tu pelo.
Esta vez fue ella quién lo besó, sujetándolo suavemente de la mandíbula.
-¿De verdad está pasando esto?-preguntó ella.
-Eso parece.
-Es raro. Tú y yo.
-No es tan raro.
-Lo es, la freaky y el popular enrollándose en un lago, eso no pasa ni en las típicas pelis para adolescentes.
-¿De qué color son mis ojos?-preguntó.
-Verdes, con un aro amarillo que rodea tus pupilas.
Summer apartó la mano de sus ojos y lo miró penetrantemente, entonces él hizo lo mismo.
-¿De qué color son mis ojos?-preguntó él, sonriendo.
-Azules.
Chris la miró, sonriendo.
-Está anocheciendo-susurró sin poder dejar de mirarla.
-¿Tienes que irte?.
-No.
-¿Y Bonnie?.
-Bonnie me importa un comino en este momento. No estás maquillada, se te ven las pecas.
-Sí, no me apetecía maquillarme.
-Eres mucho más bonita así, me gustan tus pecas.
-Y a mí tus ojos.
-Summer-susurró él.
-¿Qué?.
-Me muero por besarte ahora mismo.
Chris se acercó despacio y la besó con suavidad en los labios.
-Hueles a canela, como a brownie o a bizcocho.
-Mi abuela siempre está preparando postres, la casa siempre huele a canela, pero no sabía que yo también.
Chris sujetó un mechón de su pelo y lo olió.
-Me encanta como hueles, sobre todo tu pelo.
Esta vez fue ella quién lo besó, sujetándolo suavemente de la mandíbula.
-¿De verdad está pasando esto?-preguntó ella.
-Eso parece.
-Es raro. Tú y yo.
-No es tan raro.
-Lo es, la freaky y el popular enrollándose en un lago, eso no pasa ni en las típicas pelis para adolescentes.
miércoles, 1 de junio de 2011
Introducción del relato "Rojo", en fase de creación.
"Cierra los ojos y no me dejes ir, por favor, cierra los ojos, no te dejaré ir, toma mi mano esta noche, no pensemos en el mañana, encontraremos un lugar a donde ir, porque nuestros corazones están sellados para siempre y nuestro amor nunca morirá.
La cuidad duerme y nosotros nos perdemos en el momento, otro beso mientras yacemos en el pavimento, si pudieran vernos dirían que estamos locos, pero ellos no entienden.
La lluvia cae, también las lágrimas, veo tu cara y me mantiene vivo, si me pierdo tu luz me guiará, yo se que tú me puedes llevar a casa, toma mi mano esta noche por última vez"
"Take my hand"
"Desde el momento en que te vi estoy como caminando con pequeñas alas en mis zapatos, mi estómago está lleno de mariposas.
Oh, me siento bien, rebotando de nube en nube, tengo la sensación de que nunca voy a bajar, si dijera que no me gusta sabrías que estoy mintiendo, cada vez que intento hablar contigo me quedo sin habla, así que dime, ¿porqué tu y yo no nos reunimos, tomamos el mundo y estamos juntos por siempre?, ¿Porqué tu y yo no nos abrazamos y volamos hacia la luna, directos al cielo?, porque sin ti nunca me van a dejar entrar"
"Why don't you and i"
"He creado un hogar aquí, para ti y para mi, y tú vas a quemarlo con tus miedos"
"Brand new eyes"
"Podría estar encerrado en una cáscara de nuez y sentirme el rey del universo"
William Shakespeare
viernes, 27 de mayo de 2011
Fragmento de la continuación de "La bailarina de la caja de música", en fase de creación.
Me lancé a la carretera, tal y como ella solía hacer, recorrí infinitas y solitarias carreteras, pasé por decenas de pueblos, de ciudades, conocí a un montón de personas y la busqué en cada pueblo de cada ciudad que visité, la busqué en cada persona que conocí.
La vi en cada chica con All Stars, en cada chica bajita, en cada chica que tocara la guitarra, en cada chica que mostrara una amplia sonrisa, en cada chica con vaqueros rotos, la vi en todas aquellas chicas, pero ninguna era ella.
Y entonces la encontré, la encontré cuando había dejado de buscarla, en medio de un millar de caras y a muchos kilómetros de mi, aún así la vi y supe que era ella, que esta vez no eran imaginaciones.
En cuanto la vi mi corazón volvió a latir después de tanto tiempo, mis pulmones se llenaron de oxígeno y pude exhalar una bocanada de aire que me pareció gloriosa, mis ojos no podían mirar otra cosa, después de tanto tiempo aún conseguía ejercer ese poder de magnetismo sobre mí.
Todos los allí presentes contemplaban la belleza de las cataratas del Niágara en una preciosa noche donde los espectaculares colores emanaban del agua, rojo, azul, amarillo, naranja, preciosos colores que se proyectaban en las caras de miles de personas que observaban embelesados, pero yo no, en lugar de mirar las cataratas contemplaba una belleza más extraordinaria, al menos para mí, una belleza que hacía que me recorriera un escalofrío por todo el cuerpo, que mi corazón galopara salvajemente en mi pecho.
Entonces me miró, entre tanta gente y a tanta distancia ella me miró directamente a mí, alertada por mis gritos mudos que pronunciaban su nombre en silencio, todo mi ser gritó sin voz su nombre y ella me oyó y a pesar de que yo había cambiado me reconoció, porque cuando me miró no vio mi cuerpo, sino mi alma.
Nos miramos durante un minuto, aunque a mí me pareció una hora, entonces ella frunció el ceño, sonrió levemente y alzó la mano a modo de saludo, no la agitó, solo la alzó y yo le respondí al saludo alzando y agitando la mía; entonces ella le dio la espalda a las cataratas y comenzó a caminar, sorteando a la gente y comprendí que tenía intención de llegar a mí, así que hice lo mismo.
Mientras recorría la larga distancia que nos separaba pensé en muchas cosas, pensé en cómo había comenzado todo esto, hacía ya siete meses, en cómo me había llevado hasta aquí, hasta ésta noche, hasta ella, ¿qué probabilidades habían de encontrármela?, ¿de que coincidiéramos en el mismo sitio, el mismo día, la misma noche?.
También pensé en mí y en el cambio que había experimentado en estos años, ya no era aquella chica de diecisiete años que ella conoció, no llevaba el pelo corto y perfectamente arreglado, ni ropa de marca y zapatos carísimos, ya no era aquella chica que no salía de casa sin estar perfectamente maquillada y arreglada.
No, en absoluto, ella iba a encontrarse con una chica de pelo largo y castaño, no cobrizo, que caía ondulando sobre los hombros, camisa desgastada, vaqueros raídos y unas All Star con las suelas derretidas por el calor del asfalto bajo los pies, con las solapas laterales rajadas, llenas de garabatos, sucias y con un agujero lo suficientemente grande como para ver de qué color eran mis calcetines.
Pero por dentro era casi la misma, seguía muriendo por ella, yo había cambiado, pero no lo que sentía por ella.
Y entonces nos alcanzamos y allí estaba mi pequeña, mi chica de la guitarra, mi chica de la moto púrpura, mi Ary, misma cara, misma ropa, mismas puntas quemadas por el sol, incluso mismas All Star rojas.
Por un momento sentí que el tiempo no había pasado, que no habían pasado todas aquellas cosas entre nosotras, casi pude ver la funda de la guitarra colgada a su espalda, las paredes de ladrillos victorianos de la escuela de arte a nuestro alrededor, incluso a mí misma con el pelo corto y las mayas de ballet.
Pero no estábamos en Baltimore, estábamos en Canadá, intentando reunir el valor para hablar, aunque yo sabía quién daría el primero paso.
-Hola, Avi.
martes, 17 de mayo de 2011
Dos mayos ☆
Y sigue doliendo igual, sigo sintiendo que me falta algo y que jamás lo voy a recuperar, sigo sintiendo ese cristal clavado en mi corazón, esa ausencia aplastante, sigo echando de menos tu voz, tu sonrisa, sigo llorando por ti, ¿es que nunca se va a acabar esto?, ¿nunca desaparecerá el dolor, ni las lagrimas, ni la estúpida esperanza de verte entrar por la puerta?, aún pienso en ti y se me antoja surrealista.
Te echo de menos hermano, cada día más y no sé que hacer con estos sentimientos, son dos años y parecen 20, pero a la vez parece que fue ayer cuando vivíamos juntos.
Tantas cosas que me hubiera gustado que vieras, tantos momentos importantes en mi vida en los que tu no estás, el día de la presentación de mi libro fantaseaba con mirar hacia el fondo de la sala y verte allí, mirándome con orgullo.
Espérame, donde tú y yo sabemos, en algún lugar sobre el arcoíris, sueño con el momento de encontrarme contigo de nuevo. Te quiero hermano, te extraño todos los días y antes me olvido de mí misma que de ti.
Te echo de menos hermano, cada día más y no sé que hacer con estos sentimientos, son dos años y parecen 20, pero a la vez parece que fue ayer cuando vivíamos juntos.
Tantas cosas que me hubiera gustado que vieras, tantos momentos importantes en mi vida en los que tu no estás, el día de la presentación de mi libro fantaseaba con mirar hacia el fondo de la sala y verte allí, mirándome con orgullo.
Espérame, donde tú y yo sabemos, en algún lugar sobre el arcoíris, sueño con el momento de encontrarme contigo de nuevo. Te quiero hermano, te extraño todos los días y antes me olvido de mí misma que de ti.
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