Como en su día lo hizo el protagonista de mi libro favorito, Mike Noonan, soñando que regresaba al hogar.
Mi Manderley es, sin duda, la punta, anoche soñé que caminaba por sus calles, bajaba a la playa y me daba un reconfortante baño, viendo las imágenes en mi cabeza tal como se ve en esta foto, aunque en mi sueño el sol no se estaba escondiendo, sino que estaba bien alto en el cielo, quemando mi piel con su reconfortante calor.
Es extraño que en el sueño no estuviera con mis amigas de allí, lo cierto es que bajaba sola aunque feliz por estar allí, como siempre.
Quisiera retirarme allí para siempre, vivir en una casita, disfrutar de la tranquilidad, pasear por sus calles solitarias, visitar la playa, atestada en verano, casi solitaria el resto del año.
Sin duda es mi lugar favorito en el mundo, adoro este lugar y soñar con él anoche no es sino un retorno al hogar, a la reconfortante paz y tranquilidad de estar en el sitio donde pertenezco.
Buenas. La lectura de sus relatos incitan un poco a que la imaginación suelte sus riendas y se desboque durante unos segundos. Buena narración para describir un lugar que todos tenemos, pero al que llamamos de diferente manera. Un saludo y siga así (carita sonríente).
ResponderEliminarP.D: Lo del parentesís es un poco por evitar los emotíconos.